Esta mañana en el autobús comentábamos lo gracioso del nombre Jardin des Plantes, pues ¿de qué si no iba a ser un jardín? Es el nombre francés de jardín botánico.
Este de Ruán era una mezcla de nuestro Retiro y el Botánico de Paseo del Prado, pero con la peculiaridad de su diseño: a la izquierda el jardín francés y a la derecha el inglés. Entre rosas y sequoyas tomamos el bocata, y en el tiempo libre nos fuimos a jugar a la zona infantil haciéndonos pasar por menores de doce años.
Ultimamos las compras en la rue Le Gros Horloge, y sobre las cinco nos fuimos con nuestras familias a casa para pasar el fin de semana con ellas.
El lunes nos vemos en Madrid.